Experimento

Jugar la Ciudad

Replicabilidad Muy alta
Estatus Finalizado
Provocación

En la Ciudad de México habitan 2 millones 363 mil 748 [1][1] Red por los Derecho de la Infancia en México (Redim) (2015) niñas y niños, que representan 26.7% de la población total de habitantes. Aún así, se ha generado poca planeación estratégica en la creación de un entorno urbano adecuado para ellas y ellos.

¿Cuál es el estado de los espacios de juego en la CDMX y quién se encarga de éstos? ¿cuál es el proceso para diseñar e implementar un espacio de juego en la CDMX?

Historia

El creciente reconocimiento de la importancia de planear y fomentar ciudades más inclusivas, ha hecho que diversos expertos y académicos aún reducidos en número replanteen y cuestionen el lugar que se le otorga a la niñez dentro de los entornos urbanos, así como su participación en las decisiones públicas. Para entender la complejidad de su relación con la ciudad es conveniente distinguir entre los derechos de los niños [2][2] A lo largo del texto, 'niños' incluirá a niños, niñas y niñez en la ciudad y a la ciudad.

Los primeros se refieren a sus derechos económicos, sociales y culturales (salud, educación, condiciones de vida adecuadas, vivienda, alimentación, etcétera), que para ser ejercidos es necesario el acceso a infraestructura y servicios de calidad. Pero el derecho de los niños a la ciudad está vinculado con las características físicas del entorno, las cuales tienen un gran impacto sobre su calidad de vida y desarrollo óptimo, así como sobre la misma relación que desarrollan con la ciudad.

La mala calidad del entorno urbano repercute directa y no exclusivamente sobre el derecho de los niños al esparcimiento y al juego, el cual —a pesar de ser esencial para las distintas etapas del desarrollo humano— siempre se considera como un derecho de menor importancia.

Si bien es cierto que los infantes, gracias a su extraordinaria imaginación, serán capaces de jugar inclusive en las situaciones más adversas, el entorno urbano inmediato puede presentarse como un gran obstáculo para el ejercicio de su derecho al juego y, por consiguiente, del desarrollo de todo su potencial.

En la Ciudad de México, el tema ha sido poco investigado. La documentación existente señala una decreciente presencia de niños en el espacio público, así como una hostilidad del entorno urbano hacia su presencia, en parte por razones de inseguridad, pero también por la existencia de espacios poco propicios para su integración.

Desafío

Pueden mencionarse tres factores que afectan directamente la inserción de la niñez en el espacio público: el lugar predominante otorgado al automóvil, la violencia en la comunidad o la percepción de inseguridad, y entender a la infancia como un sector poblacional vulnerable.

Estas situaciones limitan el entendimiento de la ciudad como espacio de juego, lo cual segrega a los niños a áreas destinadas para “ellos” y no se plantea un esquema de políticas públicas que permita el ejercicio del derecho a la ciudad para toda la población.

Mientras logramos la transición a una cultura peatonal en la Ciudad de México, un ambiente de seguridad estable y una sociedad que considere a los niños como una población empoderada y no vulnerable, los espacios públicos urbanos de juego son necesarios.

Por ello, debemos enfocarnos en la calidad de los espacios de juego urbano que le corresponde a la niñez, hacer énfasis en espacios que contemplen sus intereses y necesidades en su planificación y diseño, y evitar el adultocentrismo, es decir, generar espacios para ellas y ellos desde la perspectiva de los adultos.

Propuesta

En el marco del proyecto anual del Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos (Cemca) para la Cooperación Técnica de la Embajada de Francia 2016/2017, Tuline Gülgönen y el área Ciudad Lúdica del LabCDMX realizaron la investigación Jugar la Ciudad: Reimaginar los espacios públicos urbanos de juego para la infancia en la Ciudad de México, publicación impresa y digital que busca esclarecer la situación actual de los espacios públicos de juego y proponer líneas de acción para pensar la integración de la niñez en la esfera pública.

Teoría de Cambio

Si se esclarece la situación actual del juego y los espacios de juego en el contexto urbano de la Ciudad de México, a través de un análisis normativo, institucional y espacial, será posible:

  • Elucidar la pérdida de oportunidades para enriquecer el desarrollo integral de los niños a través del juego y la ciudad.
  • Enfatizar la necesidad de estrategias transversales para mejorar la planeación, diseño y mantenimiento de los espacios de juego (actuales y nuevos).
  • Visibilizar la falta de equidad en la disposición de espacios de juego en el territorio.
  • Resaltar la urgencia de un catálogo homogéneo de espacios verdes y públicos, distinguiendo aquellos con espacio de juego que sirva como herramienta de planeación urbana.
  • Generar recomendaciones a política pública para renovar espacios públicos de juego o construir nuevos a partir de una nueva forma de entender el juego urbano.
  • Incentivar diálogos para cambiar el entendimiento de la niñez como parte de la población vulnerable a sujetos poseedores de derechos.


Resultados

Jugar la Ciudad es una publicación que deconstruye la situación actual de los espacios públicos urbanos de juego en la CDMX a través de:

  1. Un análisis de la documentación disponible sobre políticas urbanas relacionadas con niños realizado vía una serie de entrevistas con trabajadores de dependencias del gobierno central y delegacional, que tuviesen programas vinculados con espacios públicos urbanos para niñez.
  2. La propuesta de mejoras en torno a la planeación, diseño y mantenimiento de los espacios públicos urbanos de juego:
    1. Plantea una manera de catalogar los espacios públicos urbanos de juego, incluyendo los existentes y proponiendo nuevos espacios que fomenten el juego libre de los niños.
    2. Propone una herramienta de participación y evaluación para ser empleada por la niñez y sus acompañantes, la cual les permitirá expresar su opinión sobre cualquier espacio público urbano de juego. Esta herramienta se probó e iteró a través de la implementación de talleres en cuatro parques delegacionales: Tlalpan, Miguel Hidalgo, Iztapalapa y Cuauhtémoc.
    3. Desarrolla una lista de elementos a considerar para enfrentar el reto de diseñar espacios públicos urbanos de juego.
    4. Delinea una serie de recomendaciones de política pública en torno a tres aspectos: normativa, instituciones y contexto.

Numeralia

  • 32 entrevistas (21 áreas de gobierno local).
  • 4 talleres para desarrollar la herramienta de evaluación (63 niños evaluaron su parque).
  • 1 publicación impresa (100 ejemplares).
  • 1 publicación digital.
Aprendizajes
  • No existe un catálogo único o mapa de todas las áreas verdes y/o espacios públicos abiertos de la Ciudad de México.
  • No existe un catálogo único o mapa de los espacios públicos de juego de la Ciudad de México.
  • Dentro del organigrama de gobierno, no existe una instancia encargada específicamente de supervisar los espacios públicos de juego, tampoco se consideran como una tipología de espacio público.
  • No existen lineamientos de planificación, diseño y mantenimiento específicos para los espacios de juego.
  • No existe la noción de diseñar un espacio de juego que responda específicamente al sitio donde está ubicado, que combine la presencia de naturaleza y permita posibilidades indefinidas, incompletas e imaginativas de juego.
  • Hay un hueco conceptual para hablar de los espacios públicos de juego en los manuales y normativas urbanas, es decir, no hay términos exactos, ni son iguales para todas las dependencias o áreas del gobierno local.
  • A nivel normativo, los “juegos infantiles” son considerados como equipamiento urbano, lo que demuestra que no se ha entendido la complejidad que merece un espacio público de juego.
  • No existen nociones básicas sobre la relación entre el diseño del espacio de juego y los beneficios cognitivos, emocionales, físicos y sociales en el desarrollo de los niños. De acuerdo a los resultados de la evaluación –implementada en los cuatro talleres–, para los niños, la naturaleza es uno de los elementos más importantes, debido a sus oportunidades de juego libre y exploración.
  • La existencia de un rubro extenso de actividades que inciden en el espacio público a cargo de instancias de gobierno provoca una descoordinación institucional. Por ello, es necesario crear mecanismos, canales y acciones para homologar y generar una noción colectiva y transversal en la planificación urbana, en específico sobre la importancia de crear ambientes lúdicos que potencien el desarrollo físico, cognitivo, emocional y social de sus habitantes.
Futuro
  • Incluir las recomendaciones de política pública desarrolladas en el nuevo Plan General de Desarrollo Urbano 2019 de la Ciudad de México.
  • Impulsar diferentes iniciativas o proyectos para mejorar la calidad de los espacios de juego y asimismo optimizar la distribución desigual de los espacios públicos o abiertos.
  • Incentivar más diálogos en torno a la importancia del juego en el entorno urbano.
  • Explorar otras tipologías de juegos urbanos y territorios lúdicos, involucrando a los niños en su concepción mediante nuevas herramientas y metodologías,
  • Generar una visión a largo plazo de creación de espacios de juego con un énfasis en justicia espacial.